Poirot se ha enfrentado a numerosos criminales, pero nunca habían sido tan peligrosos. Líderes organizados a nivel internacional, sin piedad y muy inteligentes, planean un último gran golpe; dirigir con mano de hierro el mundo. Poirot es el único que puede frenarlos, tendrá que enfrentarse a un sinfín de intentos de asesinato y multitud de ardides