Los caminos del Rionegro relatan la aventura de buscar la comunicación de Bogotá con el rio magdalena a través de la rica y agreste región del valle del rio Negro desde los tiempos de Tomas Cipriano de Mosquera. Cuenta como el francés Antonie Poncet primero y unos años después Indalecio Liévano se abrieron paso por este vasto territorio de noroccidente de Cundinamarca y como, con rusticas herramientas y equipo, señalaron la ruta del futuro Ferrocarril de Cundinamarca, el mismo que con nostalgia es recordado por quienes en la década de 1960 hicieron el romántico recorrido entre Bogotá y la costa atlántica