La marca del Diablo

Reseña del libro

Un secreto que la Iglesia ha preferido mantener oculto. Una conspiración siniestra que pretende encumbrar el mal. Solo una mujer puede poner fin a la pesadilla antes de que esta se haga realidad Elisabetta Celestino, joven y brillante arqueóloga, se queda estupefacta cuando el Vaticano le prohíbe, sin más explicaciones, que siga investigando los símbolos astrológicos hallados en un muro de las catacumbas de San Calixto. Un brutal asalto que acaba con la vida de su novio y pone en serio peligro la suya propia la lleva a un cambio de vida radical: abandona su profesión y se dedica a la enseñanza en un tranquilo colegio de Roma. Sin embargo, no consigue olvidar al hombre que los atacó, ni la extraña marca que creyó ver en su cuerpo. Varios años después, cuando la muerte del Santo Padre conduce a la Iglesia a un nuevo cónclave, unos extraños cadáveres aparecen en las mismas catacumbas que Elisabetta exploró años atrás. Quien había sido su jefe recurre a ella para que investigue algo que turba profundamente a la Iglesia ahora que todos los ojos están puestos en Roma: a pesar del estado de momificación de los cadáveres, se aprecia en ellos una marca al final de la espalda… La misma que Elisabetta vio en el hombre que intentó matarla. Trepidante thriller histórico que nos plantea una reescritura del pasado tal y como lo conocemos, al mismo tiempo que nos enfrenta a un dilema apasionante. ¿Existen los hijos del diablo? ¿Están organizados a la espera de hacerse con el poder? Con la habilidad que le caracteriza, Glenn Cooper nos sumerge en una trama centrada en uno de los muchos secretos que oculta la jerarquía de Roma, un texto esotérico que anuncia el final del cristianismo y el advenimiento de un nuevo y maligno orden.