Este es un libro fruto de la relación entre un equipo de profesoras y profesores investigadores y un colegio público de Viña del Mar que les abrió las puertas para intentar comprender lo que ocurre en sus aulas y lo que se hace cuando se enseña. El equipó grabó las clases durante 2013 y continuó viendo esas grabaciones por tres años, analizando minuto a minuto los significados que se construían en la interacción en esas sesiones en particular. El texto no reproduce una crítica a las capacidades de docentes en cuanto a su enseñanza o de las y los estudiantes en cuanto a su aprendizaje curricular, como a juicio de los autores muchos hacen, sino que más bien expresa la comprensión de la interacción en el aula de otra manera, para poder mejorar las acciones pedagógicas y ampliar las posibilidades de aprendizaje y desarrollo de los estudiantes, especialmente de aquellos de escuelas públicas.