Facetas de la interpretación consta de nueve capítulos. En el primero, el autor aborda el tema del método en la Filosofía, hace un repaso histórico –desde el logicismo hasta el criticismo moderno–, e insiste en la hermenéutica como el principal método. Además, insiste, debe ser una hermenéutica analógica, porque es la que ayuda a la metafísica a no errar en el método y abstraer unívocamente el ser. Del capítulo segundo al séptimo, Beuchot analiza la manera en que la analogía se hace presente en el método de la Filosofía de diversos autores: Brentano y la recuperación que hace de la analogía –aunque incompleta–; Ch. S. Peirce y la metafísica estrechamente ligada a su semiótica; Nietzsche y su caracterización como hermeneuta analógico; Martin Heidegger y su hermenéutica que llegó a tocar los polos de la univocidad y de la equivocidad; Hannah Arendt y su análisis sobre el juicio que relaciona el juicio prudencial o phrónesis con el juicio reflexionante; y Jürgen Habermas y su reflexión sobre la legitimación del poder que requiere de la hermenéutica analógica. En el capítulo octavo, Beuchot analiza algunos aspectos del pensamiento posmoderno, en especial a autores como Derrida y Bauman, y realiza una crítica a partir del pensamiento analógico. Por último, en el capítulo noveno, nuestro autor reflexiona sobre la situación actual de la hermenéutica, dialogando con pensadores como Vattimo, Grodin, Ferraris, Apel, Habermas, Cortina y Conill, para defender la necesidad de una hermenéutica analógica.