Ser homosexual siempre ha sido un tema complejo, más aún en una sociedad como la nuestra, tan llena de prejuicios y rodeada por el halo de la ignorancia. Para Rosario, sin embargo, una guapa española estudiante de psicología abiertamente lesbiana, no significa ningún problema, es más, lleva su bandera con orgullo y dada su sensualidad innata es una completa experta conquistando. No así para Dara, una joven chilena criada en la doctrina del evangelio cristiano cuyas normas son tan estrictas como arcaicas; para ella el rol femenino está ligado a la sumisión y la heteronorma, la homosexualidad es vista como una enfermedad y quienes la “padecen” deben ser corregidos para volver a enrielarse en los caminos del Señor... Para Dara también regía esta norma, hasta que su camino se cruza con el de Rosario, la mujer más bella que jamás ha visto, quien revoluciona todos y cada uno de sus sentidos. La joven debe batirse entre el amor y la desdicha, entre sus principios y la pasión que la consume hasta quemarla cada vez que se encuentra cerca de Rosario. ¿Será posible que exista una relación entre dos chicas cuyos principios son tan diferentes? La autora se empeñó en dejar en claro que el amor es más fuerte que cualquier creencia, pero para quienes no lo entienden, es fácil convertir en un infierno la vida de los demás. Es así como Dara debe enfrentarse a las cruces con las que carga y Rosario, la mujer que logra hacerla conocer el amor.