Este libro muestra a la humanidad el mensaje de amor y sanación que entregan los cristales. (16) Con cinco décadas dedicadas a la investigación en educación, e incorporando su experiencia como Terapeuta con cristales, la autora plantea la insuficiencia de los lineamientos actuales de la educación formal al no entregar herramientas para Aprender a Ser. (37). Se pregunta qué tipo de formación necesitamos para gestar una nueva sociedad, más armónica y amorosa.(16) Propone que sea el corazón y no la mente el centro del aprendizaje, enfocado prioritariamente en conocerse más y mejor a sí mismo y desde ahí, conocer el afuera con una fuerte dosis de espiritualidad. Un sistema educativo que facilite el encuentro con la esencia del Yo Soy y la misión en la vida. (55)