Este libro constituye la primera etapa de un peregrinaje por la paz realizado por un hombre que ha dedicado su vida a escribir crónicas sobre la realidad, en primera persona: un periodista que ha sido siempre consciente del abismo cultural, ideológico y social que se abre en Occidente, y que es ignorado por la mayoría de nosotros. Ha vivido en Oriente durante más de treinta años y cree que no se debe permitir la barbarie, la intolerancia, la hipocresía y la indiferencia del mundo occidental...el autor devela los intereses detrás del conflicto y nos lleva a pensar de manera crítica acerca de los sucesos actuales: "Se trata de no continuar inconscientemente en la dirección en que estamos en este momento. Esta dirección es desatinada, como es desatinada la guerra de Osama Bin Laden y la de George Bush. Los dos citan a Dios, pero con esto no hacen más divinas sus masacres" Esta impactante reflexión sobre la guerra y el eterno conflicto entre Oriente y Occidente nos recuerda que la paz no se puede improvisar, y que sin comprensión y aceptación mutua no hay diálogo posible.